25/09/2018
Los jóvenes de hoy quedan en la red a conversar, compartir experiencias, explorar el mundo; se enamoran y rompen relaciones por internet. En nuestros días se han multiplicado las formas de comunicarnos, de llegar acuerdos, manifestar nuestra opinión -a favor o en contra- y ya no necesitamos tener presentes todos los elementos del contexto comunicativo para entender la situación: en el mundo virtual, el espacio se diluye, y el tiempo también.
No obstante, seguimos teniendo la necesidad de conversar e interactuar, ya que, gracias a la conversación (el intercambio de opiniones entre un emisor- receptor) se intercambian roles, llegamos a acuerdos, convencemos a los demás (o no). Podemos recordemos un pasado reciente, cuando nuestros abuelos se reunían entorno a un grupo de compañeros en el campo, en la fábrica o en la calle para hablar, para compartir sus ideas y sus conocimientos, los aprendizajes del día, las aventuras inesperadas que quedaban en la tradición. De hecho, la realidad del día a día de nuestros antepasados han pasado de generación en generación de forma oral, a través de conversaciones construidas colectivamente, generando conocimiento compartido en comunidad.
Hoy en día la tecnología nos permite eliminar las barreras del tiempo – con mensajes simultáneos y asíncronos –, y del espacio – con una interconexión global a gran escala –, ya sea compartiendo narrativas a través de las redes sociales, como pueden ser Twitter, o Facebook, o mediante cualquier otra herramienta que nos permita una interacción instantánea y multimodal. Gracias a ellas podremos establecer líneas de conversación con amigos y con desconocidos, generando conscientemente un debate dialógico online que nos ofrecerá las características esenciales de una sesión de intercambio abierta a toda una comunidad, con múltiples emisores y receptores a la vez.
En un debate dialógico online podemos conversar con expertos en temas que nos interesen, sin la distancia que sí establecen otros ámbitos protocolizados, y podemos plantear consultas “de tú a tú”, en esa relación entre iguales que caracteriza el aprendizaje no formal. Participar en debates de este tipo de forma regular puede generar, de hecho, el vínculo necesario para generar una comunidad de aprendizaje auto-gestionada. El aprendizaje entre iguales, con diálogo informal y democratización en la línea discursiva, es una de las características más significativas del debate dialógico online, que nos ofrece la posibilidad de preguntar y aprender en cualquier momento, en cualquier lugar, con una simple conexión de red y un dispositivo en nuestras manos. Actualmente la tecnología nos facilita mantener conversaciones con personas con los mismos intereses, organizar encuentros virtuales entre grupos afines, proponer encuestas abiertas, o intercambiar enlaces de interés personal y profesional.
Ya sea en forma de chat en Twitter (con el #hashtag o #etiqueta adecuada), de grupo en LinkedIn y Facebook (abriendo invitaciones dirigidas), o de Foros en entornos diversos, iniciar un debate dialógico online de forma sistemática es una opción de formación temática, una oportunidad para la lluvia de ideas en proyectos comunes, y el nacimiento de una estrategia de trabajo en red o networking internacional.
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En este universo de conversación global en diversos medios, la transmedia comunicativa ( et al) se convierte en la opción más frecuente: las conversaciones simultáneas crean una fragmentación del conocimiento, una cacofonía de discursos complejos donde las imágenes, los mensajes de texto, los vídeos y los datos de gestión o metadatos se mezclan en códigos superpuestos y secuencias parcialmente ocultas. Recomponer la conversación y reconstruir el relato requiere competencias digitales actualizadas, pero llegar a conciliar intenciones diversas y opiniones individuales requiere además competencias de interrelación personal y habilidades de comunicación y mediación intercultural. La UNESCO destaca las habilidades globales, mal llamadas “soft skills”, o habilidades blandas, que son esenciales para abordar habilidades comunicativas y cognitivas en sociedades complejas, y prioriza las Competencias Interculturales (UNESCO, 2013), basadas en el diálogo y el respeto mutuo.
En un reciente documento de orientación para las políticas juveniles, la Unión Europea (EU, 2018) ha propuesto el intercambio y el debate abierto como una estrategia de formación y acompañamiento en el crecimiento intelectual, lingüístico y laboral de los jóvenes que acceden al mundo laboral en una cultura digital. El debate dialógico online permite desarrollar habilitades intrapersonales de autocontrol y reflexión individual, y competencias interpersonales que nos ayuden a dar soluciones a los problemas que la vida nos va a proponer, al tiempo que nos ofrece acceso a un mundo de conversaciones enriquecedoras.
De hecho, en esta nueva cultura global y digital nos estamos moviendo en un “mar de datos” ingente, dinámico y creciente, que se entrecruza con la información que nosotros mismos generamos con nuestra participación online, con nuestros registros, con la trazabilidad de las compras, las informaciones que consultamos, de los que consumimos… Todos esos datos nos acompañan aunque no seamos conscientes de ello. Hoy día no podemos reducir la interpretación de los mensajes al texto directo que recibimos, sino que hemos de aprender a interpretar los datos de filiación, de registro y de cuantificación en un contexto global. Difícilmente podremos llegar a entender una noticia, si no abrimos el espíritu crítico y nos interesamos por su origen, los procesos de difusión y la coreografía mediática que lo acompaña. Hemos de aprender a conocer los hechos des de diferentes miradas, ampliar mensajes en diferentes medios, iniciar reflexiones colaborativas y no de forma aislada, para entender en su totalidad cualquier acontecimiento. Como ya hemos indicado anteriormente, somos seres sociales que necesitamos la interacción para sentirnos completos: conversar es la base de nuestro crecimiento cognitivo y social.
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Como educadores, encontramos en este debate dialógico online, conocido como Twitter Chat, una herramienta que nos ayuda a desarrollar y consolidar la competencial digital de los participantes. La fórmula del Chat educativo podría ser una actividad recurrente en el ámbito docente (formación profesional) y en cualquier entrono educativo (autoaprendizaje para estudiantes), o incluso en entornos informales, en las que se genera una comunidad educativa espontánea de intenciones efímeras (responsables de proyectos, familiares, amigos interesados en un tema en concreto, etc).
La dinámica de los Twitter Chat consolidados actualmente está estructurada a partir de una secuencia de preguntas propuestas por los gestores del debate (no requiere autorización ni certificación alguna). Las preguntas que moderan la secuencia de la conversación digital (unas 5 en un periodo de 60 minutos) se plantean vertebradas bajo un tema concreto que sea de interés para la audiencia destinataria. Si se gestionan adecuadamente, estas preguntas dirigen la interacción en diversos ámbitos:
Cabe comentar que será importante cómo se construyen las preguntas, qué secuencia cognitiva promueves, qué aspectos emocionales activan, que pensaminetos promueven en las mentes inquietas, para ir vertebrando esa “conversación” que dará estructura a la construcción del conocimiento (Soriano, 2018). En 2018, las autoras tuvieron ocasión de presentar materiales de formación específicos para trabajar el debate dialógico online en la UNESCO MOBILE WEEK, y actualmente son accesibles en la red(Lorenzo & Soriano, 2018),
En la conversación dialógica digital en tiempo real, las preguntas son fundamentales para que el debate ofrezca oportunidades de interacción dinámica y enriquecedora. De hecho, la interacción que se genera en ese momento concreto (de forma deslocalizada, a menudo anónima, entre iguales), es la base sobre la que podemos compartir experiencias y aprendizajes, construir comunidad e identificarnos con sociedad global que nos va ayudar a potencias las habilidades “blandas” como la empatía, el respeto a las opiniones ajenas, el conocimiento del otro, y la identidad ética. A partir de los temas que trabajemos en las diferentes sesiones, vamos a poder desarrollar aspectos éticos que necesitamos tener presente para alcanzar la agenda 2030 de las Naciones Unidas (UN, 2030). A menudo, estas son las estrategias más eficientes que vertebran los debates dialógicos online, los cuales generarán el flujo de datos que interpretaremos en función de las competencias que se irán desarrollando, y las habilidades comunicativas que dominemos. De ahí, la importancia de consolidar estas estrategias interactivas (lingüísticas, emocionales, discursivas) para promover espacios de acción ciudadana donde los jóvenes puedan aplicar sus competencias digitales. De ahí que identifiquemos preguntas de debate en tres niveles de dificultad:
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La gradación en estos niveles enlaza con las HOT de la pirámide de Bloom, las propuestas de seis niveles PISA de la OCDE, y los Marcos de la UNESCO para el trabajo de las competencias digitales en el currículum. Las siete competencias macro propuesta por Mmantsetsa Marope, Patrick Griffin y Carmel Gallagher en Future Competences and the Future of Curriculum (Marope et al., 2017), se identifican y desarrollan a través de los conocimientos, los datos, los conceptos, habilidades, la tecnología, los valores y las actitudes.
Gestionar esta información adecuadamente nos ha de permitir desarrollar las 7 competencias macro que todos los currículums necesitan incorporar urgentemente, que según este estudio de la UNESCO son:
Si tenemos presente la gradación de las preguntas que hemos propuesto en este documento, ofreceremos a nuestra audiencia (docentes, alumnos de diferentes niveles, responsables familiares, ciudadanos en general) una sesión donde sus conocimientos, habilidades y valores se desarrollarán en narraciones compartidas, consolidando sus estrategias de aprender a aprender para el futuro. Evidentemente, la interacción evoluciona y requiere nuevos datos y nuevos retos, de modo que se enfrentará al cambio con la experiencia conseguida. Cuando se creen nuevos espacios de interacción personal y de relación colectiva, habremos de aprender de nuevo a codificar signos y gestionar relaciones: tal vez en un futuro se codificarán ondas cerebrales, nos informaremos mutuamente de nuestros estados de ánimo con colores automáticos en el texto de la pantalla, o iniciaremos conversaciones virtuales en objetos conectados que aún están por descubrir. En todo caso, la autenticidad de una conversación honesta, y la riqueza de la interacción humana seguirán siendo valores sociales incuestionables.
Las tecnología actual nos permiten registrar todas las interacciones de la conversación colectiva (en pdf, en web, en html, en formatos diversos), para poder recuperarlas, consultar los enlaces compartidos, continuar ampliándolos y compartiéndolos, y construir conocimiento a partir de la documentación existente. Estos archivos representan, por una parte, el legado del aprendizaje digital que la humanidad ha iniciado y apenas despliega en una esfera virtual intangible en expansión. Por el otro, serán el testimonio de una época crecientemente acelerada, donde los aprendizajes dejan de ser un objeto acumulable, para convertirse en fluidos de interconexión y contacto personal que enriquecen los colectivos y estimulan la innovación y el pensamiento creativo individual. En este mundo tecnificado en el que vivimos, la dimensión humana es más valiosa y reveladora que nunca.
Neus Lorenzo / Àngels Soriano
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EU (2018) Developing digital youth work. Policy recommendations, training needs and good practice examples for youth workers and decision-makers : expert group set up under the European Union Work Plan for Youth for 2016-2018.
https://publications.europa.eu/en/publication-detail/-/publication/fbc18822-07cb-11e8-b8f5-01aa75ed71a1
Lorenzo, N. & Soriano, A. (2018). Dialogic Interaction for Enhancing Digital Literacy. https://onedrive.live.com/View.aspx?resid=6729A7427EF70C18!27280&app=PowerPoint&wdSlideId=256&wdModeSwitchTime=1534770385544&authkey=!AG8a0ewskAKIvo4
Materiales de formación: https://drive.google.com/drive/folders/1XGAaSgIhaBDuAIJj8_TbAi6-Zl_0k3qJ
Josefowicz, M.; Gallón, R.; Lorenzo, N. (2017) Transmedia and Transliteracy in Nemetical Analysis
http://transformationsociety.net/wp-content/uploads/2017/09/gallon-chap_EIST4-2018.pdf
M. Marope, P. Griffin, C. Gallagher, Future Competences and the Future of Curriculum. A Global Reference for Curricula Transformation, Paris, IBE-UNESCO, 2017. http://www.ibe.unesco.org/sites/default/files/resources/02_future_competences_and_the_future_of_curriculum_30oct.v2.pdf
UNESCO (2013) Intercultural Competences. Conceptual and Operational Framework
http://unesdoc.unesco.org/images/0021/002197/219768e.pdf
Soriano, A. (2018) #XATAC5 A LA UNESCO: APORTANT IDEES A LA MOBILE LEARNING WEEK.
https://xatac5.com/2018/03/27/xatac5-a-la-unesco-aportant-idees-a-la-mobile-learning-week/
Publicado por: Juanmi Muñoz